Dispareunia es el concepto que se utiliza para definir el dolor experimentado en los genitales, tanto masculinos como femeninos, durante las relaciones sexuales con coito.
Abarca desde la irritación vaginal postcoital hasta un profundo dolor. Se define como dolor o molestia antes, después o durante la relación sexual. La Dispareunia es más común en mujeres que en hombres, y según ciertos estudios, afecta, aproximadamente al 15% de las mujeres.
Las mujeres que acuden a consulta por esta disfunción, suelen relatar que experimentan sensaciones que van desde el escozor, el dolor cortante, ardor o quemazón, picor o simplemente molestia o desagrado al mantener el coito. Al igual que hay una gran variedad de sensaciones incomodas, como las relatadas anteriormente, también es amplio, el espectro físico en el que se pueden presentar, que pueden presentarse pacientes que notan estas molestias en la entrada de la vagina, y otras en la parte interna, e incluso se presentan casos en las que dicho dolor se siente dentro de la región pélvica.
La Dispareunia está relacionada, y frecuentemente coincide, con el vaginismo. Episodios repetidos de vaginismos, pueden causar Dispareunia, y viceversa.
Si padeces estos síntomas, en clinica-abad, haremos un diagnóstico completo a través de una entrevista clínica, que nos permitirá identificar los factores psicológicos que impiden la excitación sexual. Nuestro principal objetivo, será ayudarte, a través de técnicas contrastadas, como la focalización sensorial y otras, a que dichos factores desaparezcan.
Dispareunia Masculina
En lo que se refiere a los hombres, la mayoría de los casos de Dispareuni que se presentan están relacionados con la presencia de dolor en la eyaculación. Por regla general, este dolor se debe a infecciones en la uretra o en las vesículas seminales, en la glándula prostática o en la vejiga urinaria, si bien, en ocasiones, también puede presentarse por fimosis.
Se han dado casos en los que ciertos hombres relatan esta dolencia, y que es causada por el contacto con el DIU de su pareja o con algunos espermicidas. En los hombres son menos habituales las causas psicológicas, como la educación inadecuada o la ansiedad por la relación, de ahí que lo primero que debería hacer, si es su caso, es una asistencia clínica con su médico de cabecera o su urólogo.